"En los últimos años, el crecimiento de la economía estuvo limitado por la débil situación del sector externo, originada en el desequilibrio en las transacciones comerciales del país y en la estrecha disponibilidad de crédito externo. La política económica debe buscar como principal objetivo el restablecimiento de los ritmos de crecimiento que tuvo el país hasta 1980. Un manejo inadecuado de la política económica podría restringir el dinamismo previsto de la actividad productiva. El gobierno ya ha tomado algunas medidas dirigidas a liberar las importaciones y estaría dispuesto a adoptar otras más drásticas con el fin de contrarrestar los efectos expansivos que tendría el auge de ingresos cambiarios y la recuperación de la inversión pública. Las autoridades económicas tienen a su disposición varios instrumentos para controlar los efectos monetarios que pueden presentarse por el fortalecimiento de las exportaciones y por la reiniciación de los proyectos de inversión pública. Dichos instrumentos deben dirigirse a captar los ahorros resultantes del proceso de recuperación económica, sin liberar aún más las importaciones, conciliando el fortalecimiento del sector externo con mayores niveles de actividad económica interna. Por otro lado, con el aparente propósito de moderar las aspiraciones de los trabajadores en las actuales negociaciones del salario mínimo, el gobierno ha anunciado una proyección más baja de inflación. Coyuntura Económica recomienda que el alza del salario mínimo para 1986 sea de un 25%, cifra ligeramente superior a la inflación en el último año."