"El artículo de Hernando Gómez Buendía tiene la ventaja de plantear el problema de la industrialización como un problema político, como un problema de poder. Este tipo de planteamiento es relativamente nuevo en nuestro medio, dentro de las corrientes ortodoxas del pensamiento económico. De las hipótesis adelantadas en dicho artículo, dos de ellas van a ser objeto de análisis aquí. Son aspectos centrales para explicar las características que toma el proceso de crecimiento industrial en la economía colombiana. El primer tipo de argumentos remite a la forma de intervención del Estado en la vida económica, primordialmente con respecto a la industrialización, derivada de la posición de la burguesía industrial en el bloque de clases en el poder. En síntesis: el autor trata de probar que el escaso desarrollo industrial se debe a la poca influencia de la burguesía industrial dentro del aparato del Estado y en consecuencia a la poca importancia que da el Estado al crecimiento del sector industrial. El segundo conjunto de argumentos que estudiaremos es el referente a la necesidad de redistribución del ingreso como condición para ampliar el mercado interior. El propósito de este comentario es demostrar que la burguesía industrial hace parte del aparato de Estado de tiempo atrás y que esa participación ha implicado una ampliación de las funciones del Estado, fundamental para acelerar el proceso de crecimiento del sector industrial. De otra parte, demostrar cómo el patrón de industrialización seguido conlleva en sí el crecimiento del mercado interior sin que sea necesario, para su reproducción y ampliación, apelar a una redistribución del ingreso. En otros términos, es posible resolver la contradicción entre acumulación y demanda, sin recurrir a medidas que tiendan a ser menos desigual la distribución del ingreso."